jueves, marzo 19, 2015

SQM o lo que callan los políticos

En serio, éste es el momento. El momento justo... No sé como expresarlo más claramente, pero en este instante, Chile vive su crisis política más grande desde el golpe de estado. Y al parecer a la gente le sigue interesando más el clásico o el culo de moda.

SQM (Soquimich) se ha vuelto una "arista" del llamado Caso Penta que siguen considerando como "arista" aunque en sí mismo es un caso. ¿Por qué? Porque a través de SQM se puede ver cómo es el mismo juego de hilos que maneja a todos los políticos por igual. SQM es la empresa que maneja y es dueño el ex yerno de Pinochet... y que en democracia firmó las garantías para continuar con el control y hacer de la clase política naciente sus aliados.

Si PENTA estaba detrás de los UDI, SQM está detrás de la Nueva Mayoría, así como Luksic está detrás de Bachellet misma. ¿Cómo podemos darnos cuenta? Las investigaciones que se promovían desde la fiscalía y las peticiones de información al respecto de sus transacciones fue demorada por SII hasta más no poder. Hay una razón: la causa prescribe en abril, por lo que si no se hace nada y se entrampa todo en burocráticos artilugios, nuestro gobierno saldrá libre de polvo y paja...

Si hasta ahora no creyó que Chile tendría una crisis de instituciones, creo que es hora que mueva su despaldo hacia atrás, tome el sorbo de su gaseosa y mire con atención lo que está sucediendo. Chile llegó a un punto en que su pueblo no le cree nada a su clase política.

Este momento, que tanto he esperado, de amanecer del pensamiento popular, pero más que nada de rebelión contra el orden statuo quo impuesto desde los 70's y perpetuado hasta este siglo por los esbirros de la democracia a medias, es el instante preciso para que las cosas cambien. El problema es que pueden mejorar o empeorar. lo bueno es que no seguiremos así, está más que claro... la idea es mejorar, pero sabemos como funciona ésto: a los oligarcas les gusta el control de la masa para que sigan enriqueciéndolos. Por lo mismo, si las cosas cambian completamente y el timón se vuelve hacia la gente y no hacia los poderes económicos, estamos claos que la posibilidad de un golpe de estado se visualiza a la vuelta de la esquina. Chile debe blindarse ante eso, debe hacer una graduación en los cambios. El golpe de timón debe ser suave en primera instancia, no dar el giro en 180º de una sola vez.

Pero lo importante es ésto: la clase política perdió. Porque Caval, SQM y PENTA son sólo la punta de es iceberg que no se puede tapar por ningún lado, como pretenden los políticos corruptos de este país.

¡Vamos que se puede cambiar esta mierda!