Crónicas de la vida diaria. Las cosas que vemos, las que no y las que simplemente no queremos ver.
viernes, diciembre 31, 2010
Adiós 2010
jueves, diciembre 16, 2010
Sueños
viernes, noviembre 26, 2010
La brecha
viernes, noviembre 05, 2010
El Chile que nadie quiere
martes, agosto 03, 2010
La flaca
sábado, julio 03, 2010
Ella baila sola
lunes, junio 14, 2010
Poetas perdidos
Mientras veía uno de esos programas mundialeros tan vacíos que están de moda por estos días y me tomaba mi cerveza negra que tanto me gusta, llegó un viejo sucio y barbudo a darme la mano. Me miró directo a los ojos y con un inentendible español mezclado con varios grados alcohólicos y un aliento que parecía venir directo de una fiesta de la vendimia, me dijo "soy poeta" y me lanzó encima tres fascículos que decían ser "libros de poesía". Inmediatamente le dije que no tenía más dinero (lo que es muy cierto por tanta salida en la que he gastado plata que no debí) y que siguiera su camino. Pero él insistió y me espetó el argumento de "léalo, no tiene que comprarlo". Y como soy un maldito cabrón, dije "ok, me quieres hacer creer que voy a comprarlo así, te voy a hacer perder el tiempo". Así que me puse a leer el fascículo mientras levantaba mi vaso de cerveza y sorbeteaba unos tragos cortos, pero sin despegar la mirada del texto. Y lo que en un principio era una broma bastante cruel se convirtió en un verdadero interés por leer los poemas. Resultó ser que este hombre era un poeta de tomo y lomo, con una rima muy extraña, pero a la vez envolvente y directa. Y cuando vi que llevaba un tercio del texto leído y el tipo seguía a mi lado, me disculpé. Le dije que realmente su poesía era perfecta, sin remilgos, sin aires de grandeza, era simple, pura y llana poesía. Le entregué el libro con una mueca de decepción y hastío, pensando en todo lo que había gastado ya en espera de esa mujer mientras que con una mínima parte de ello podría haber seguido leyendo.
Y me dio mucha pena verlo irse, orgulloso con sus fascículos bajo el brazo rumbo a la siguiente mesa, repitiendo el mismo discurso, con las mismas pausas y el mismo aliento. Cuántos artistas y poetas habrá en esta ciudad vendiendo sus obras en paupérrimas condiciones, intentando mostrar quienes son, evidenciando ese talento tan esquivo para algunos y tan natural para otros. Y cuántos de ellos nunca darán a conocer su arte. Quizás algún día los poetas perdidos y los artistas olvidados sean honrados con algún monumento. Por ahora sólo podemos aceptar las migajas de su talento marchito.
jueves, mayo 13, 2010
La nueva interpretación
Hace un par de días Benedicto XVI, excelentísimo Papa de la Iglesia Católica, Santo Padre de la Iglesia y máximo pastor de las ovejas occidentales, dio una conferencia de prensa muy austera sobre el avión que lo transportaba en una nueva gira (y dicen que la iglesia tiene problemas de dinero...) En esta rueda de prensa Benedicto "Palpatine" XVI dijo que algunas cosas (por primera vez en siglos) pueden ser reinterpretadas. Y habló de las epifanías de Fátima y sobre el fin de la iglesia predicho en aquella ocasión y el fin de los tiempos contemporáneos. Y atinó a decir que su interpretación nueva y fulgurante es que se refiere a los curas que competen pedofilia y abusos dentro de la propia iglesia. Digamos que se las dio de profeta interpretando la caída del templo y su reconstrucción en 3 días. Pero la diferencia es que a él no lo escuchan. ¿Porqué? porque la iglesia católica pasa por su peor crisis. Una crisis que no puede ser sanada con nada excepto reformas fundamentales en su estructura y dogmas.
Por primera vez en siglos los sacerdotes y obispos discuten sobre eliminar el celibato como una regla prioritaria del sacerdocio y dejarlo a la propia elección. También se alzan por primera vez voces para que las mujeres puedan ser sacerdotisas, para que no se trate al homosexualismo como una enfermedad o una elección (el mayor error que cometieron fue decir que no hay homosexualismo en otras especies cuando hay demasiado casos comprobados), para que la iglesia deje la política de lado y se dedique a lo que tiene que hacer y muchas otras cosas que es demasiado largo de cuantificar. Pero todas estas voces se pierden en el viendo del conservadurismo extremo, la pechoñez de algunos y sobretodo la venda que ciega al Vaticano y su séquito de dirigentes eclesiásticos que siempre han aprobado el sistema de statuo quo antes que cualquier otra posibilidad de reforma o crítica a la forma en que hacen las cosas.
Este es un momento muy importante para esta religión. Se vienen tiempos difíciles, extremistas, fundamentalistas y dogmáticos que chocarán con las corrientes reformistas y liberales que se escuchan en todo el mundo. Cuando estamos aún en las primeras etapas de este milenio es impresionante encontrar tanta ciencia y tecnología conviviendo a la par con pensamientos creacionistas y dogmas anti ciencia. Pareciera que nunca vamos a llegar un concenso sobre nada aquí.
Tal vez es hora de formar mi propia religión. El yoísmo.
domingo, mayo 02, 2010
Leyendo nuevos libros
Y es que entre toda la vorágine que estoy viviendo, desde que me separé no he podido dar la vuelta a esa página del todo. Aunque estoy tranquilo, manejo mi vida bastante bien, vuelvo a leer y releo cada vez las últimas líneas de esa hoja esperando entender las cosas. Y tengo tomada la página desde una de sus esquinas hace mucho rato, pero la mano no me ha obedecido para dar la vuelta completamente y seguir leyendo lo que viene más adelante. Y otros en cambio tienen esa capacidad, leen rápido, dan vueltas las páginas como si fuesen cartas en un mazo y buscan la siguiente esperando una nueva emoción, una nueva forma de vivir. Y eso me ha afectado mucho.
Puede ser que internamente me he vuelto un adicto a releer las cosas en mi vida, pero también se muy en el fondo que las otras páginas que me esperan pueden ser distintas, mejores o peores.
Y hoy creo que estoy preparado, después de revisar bien la última página, de por fin pasar a la siguiente. Quien sabe que historias vendrán más adelante.
domingo, abril 25, 2010
Obituario
Cuando mi mamá falleció el 2003, hice un discurso que me salió muy rápido, sin trabas, como si hubiese estado guardado en mi subconsciente desde hacía mucho. Tal vez mi mente estaba esperando ese momento sin decírmelo, como quien guarda absurdamente un secreto que no tenía por qué ser guardado. Y el discurso fue emotivo, pero sobretodo chistoso. Recordé muchas de sus tallas, las tonteras que nos decía y algunas situaciones cómicas que tuvo en su vida. Y la gente perdió por un momento el rictus trágico de la muerte ajena y miró el ataúd con alegría sincera de haber conocido a mi mamá.
Hoy acompañé a una amiga, Alejandra, en el entierro de su padre, un hombre esforzado que trabajó toda su vida muy duro y que tenía múltiples males que lo perturbaban y le impedían hacer una vida normal. Fue muy lejos, en un cementerio llamado "Jardín Sacramental" en San Bernardo. La familia y algunos amigos buscábamos dar nuestro pésame, hacer sentir el apoyo tan magro y sin peso que todos damos en una situación en la que no puedes hacer absolutamente nada por esa persona; su dolor la consume por dentro, ninguna palabra ni frase hecha sirve para estos casos. Por eso, cuando la abracé sólo atiné a decirle "te quiero mucho". Pensé en lo burda y tontas de las palabras, podría haberlas ocupado en cualquier otra ocasión, pero salieron con una rapidez tal que mis labios se rebelaron ante mi cerebro que intentó en vano parar algunas de sus sílabas finales.
Cuando el sepelio se realizó vinieron los discursos y cantos de rigor. Y como siempre, todos quienes nos dejan en este mundo pasan a ser parte de esa casta que no tiene errores, que son casi perfectos. La muerte tiene esa capacidad única de limpiar todo cuanto hacemos mal y resaltar lo bueno exclusivamente. Y tal vez siempre debería ser así; seguramente nos querríamos más y pelearíamos muchísimo menos, pero eso es otro tema.
Lo que me insta a escribir hoy es que, al igual como yo hice mi despedida de una manera inusual para el entierro de mi madre, la Jana hizo su despedida de una manera que jamás había escuchado. No habló de su padre, a quien amaba y respetaba mucho, sino de quienes lo rodearon. Explicó que para ella su padre había sido un gran hombre gracias a todos quienes le habían acompañado en la vida, quienes lo formaron y apoyaron. Incluso les agradeció por ello y les felicitó por las grandes y bellas familias que con esa actitud han ido sembrando. Y fue la primera vez que un obituario me hizo tanto sentido. Porque todos somos entes unitarios, únicos e imperfectos que vagamos por este mundo buscando un objetivo. Siempre pensamos que nuestros logros son nuestros, pero también son de todos aquellos que han estado a tu lado. Tus fracasos son apoyados por ellos y tus triunfos son disfrutados con alegría sincera casi como si fuesen propios. Y de eso se trata. Si haces que los demás se sientan bien, tú te sentirás bien. Si logras ayudar a quienes te acompañan en este camino, es probable que a ti también te ayuden en otra ocasión. Pero no es por eso que debemos hacerlo, tiene que ser por la genuina razón de que no tenemos nada mejor que ofrecer a este mundo que hacer que quienes te rodean estén mejor.
Y tal vez por eso los obituarios son tan importantes, porque en el momento de mayor dolor te hacen sentir reconfortado; y nos hacen entender que todos (cual más, cuál menos) fuimos grandes personas en algún momento de nuestras vidas.
lunes, abril 19, 2010
La nueva forma de gobernar
¿Qué ha pasado? todo y nada. ¿Por qué? porque nuestro nuevo gobierno encabezado por Piñera y sus Chicago Boys se ha visto en la precaria situación de ver que todo lo que criticaban no era tan fácil de cambiar y que todo lo que creían poder hacer mejor están a mucha distancia de lograr siquiera de igualarlo. Y es que su inexperiencia se les nota a la legua. Es cosa de ver a quienes han ido ocupando los cargos que fueron desdeñados por los cabecillas y mandamases de la derecha, como las vocerías, subsecretarías, seremis y otros. Y es en este nivel en el cual Chile realmente se mueve. No crean ustedes que Chile lo maneja el presidente o que el congreso hace algo que cambie tu vida de un día para otro. Todos los procesos gubernamentales en los tres poderes (ejecutivo, legislativo y judicial) comprenden procesos largos, tediosos y llenos de revisiones y contrarevisiones para aunar mejor todas las opiniones. Es así como una idea muy buena termina siendo un barniz del original y dejando mucho como estaba sin arreglar nada de fondo.
Pero en el caso de los seremis y subsecretarios eso es distinto. Muchas decisiones se toman en estas instancias, lejos de la mano protectora del presidente y bajo la mirada perdida del ministro. Y si pones gente sin experiencia o sin manejo de las situaciones, tendrás un gobierno muy poco estable.
Otra cosa que he notado es la improvisación. Ya que en el conglomerado no tienen suficiente gente para llenar los cupos, llaman a personas que cumplen funciones parecidas pero en lugares donde la presión por ese tipo de trabajo es infinitamente menor. Es así como el encargado de prensa renunció al poco rato, ya que por culpa de su nuevo trabajo (cambió la dirección de su diario en Osorno por el trabajo en la Moneda) perdió a su mujer y las ganas de seguir trabajando. Así que tomó todas sus pilchas y se mandó a cambiar de nuevo al sur. Y bien por él.
Estaba claro que el inicio de un gobierno como éste iba a ser raro, lleno de errores y sobretodo mucho bla-bla y pocas soluciones. Lo peor es que ni siquiera el presidente cuenta con la empatía para revertir esto. Claro, porque todos conocemos a Piñera y su infinito afán de figurar, de hacerse ver y de dejar huella. Es la personificación del político rancio de principio de los 70 en USA, cuando se sacaban fotos con los hippies mientras hacían leyes que promovían guerras contra las que los hippies luchaban. Por eso me dio tanta rabia ver cómo la imagen que Chile había alcanzado en el exterior con Lagos y Bachelet se iba al carajo con un "Do yo want to see my watch?" lanzado sin tapujos frente a un Barack Obama que no entendía porqué un tipo como éste copiaba las ideas de su mujer. Escucharlo en el podio hablar su excelente inglés con el acento más latino tercermundista de la historia y sus trajes 4 tallas más grandes me dio escalofríos. Qué decir cuando supe que se había ido a trotar con el presidente de Colombia y sólo trotó la primera cuadra para que le sacaran fotos. Ese tipo de cosas hacen que todo lo que pensé de Piñera siempre se confirme punto por punto.
Una pena para el país, pero una alegría sincera para los medios de comunicación. Tendremos circo por varios años, un circo pobre con un señor corales de traje 4 veces más grande y al que le faltan los leones, el domador y los trapecistas, pero que está rodeado de muchísimos payasos.
martes, abril 06, 2010
La resurrección
Yo considero que la creencia en este momento es un salto de fe al vacío oscuro y sin vuelta. Para quienes son agnósticos está claro que es imposible. Para quienes creen en Jesús es algo obvio y no se puede siquiera poner en duda. Y las generaciones de creyentes han pasado de boca en boca la historia del hijo de Dios que renació entre los muertos, sembrando la esperanza en el poder y la gloria de quien alguna vez en los años finales de la vida del hombre, nos vuelva a la vida en su santo reino.
Para mí es algo indescifrable, porque en todas las ocasiones que he cruzado la línea del análisis frío y calculador, la historia me parece muy bien armada por quienes quieren que nos la traguemos; pero luego aparece mi ser interior, ese ser espiritual que se mantiene muy alejado y escondido entre mis entrañas que me dice "en algo hay que creer". Y es entonces cuando me cuestiono la real causa de la necesidad de creencia en algo divino. Y me parece que es por la necesidad de pertenencia. En algunos casos (como debió pasarle a la mayoría de ustedes) son bautizados antes de poder decidirlo por sí mismos. Y entonces, la tradición familiar se convierte en el dogma, no por convicción, sino por obligación. Y desde ese minuto es que la creencia religiosa se convierte en algo muy poco sustancial. El pensamiento lógico más precario puede echar por tierra todo lo que plantean las religiones, ya que su único fundamento es decir ante cualquier duda "es un acto de fe".
Admiro a quienes creen en algo tanto como para odiar a quienes no lo ven como ellos. Me encantaría saber que se siente estar dentro de una burbuja tal en la que nada pueda ser revelado como improbable. Aunque fui acólito durante muchos años y estuve a punto de ser seminarista, nunca llegué al punto de creer que tenía la verdad absoluta. Y es que siempre me pareció que todas las religiones apelan a lo mismo que los mitos: la explicación divina para los hechos naturales extraordinarios. Es por eso que me parece tan extraño que todos por su parte traten de tomar las banderas de la única verdad. No existe una religión pandémica, una que reúna a todos en un solo credo, porque es imposible generar una creencia tal, sin base ni pruebas, que convenza a todo el mundo.
Por eso que cada vez más las sectas se están convirtiendo en una fuerza importante dentro de las vetas religiosas, los cultos de pocas personas, más extremos, cerrados y sectarios permiten un mejor manejo del control sobre sus feligreses.
Hay veces en que digo "es necesario creer en algo más". Pero hace algún tiempo le he encontrado toda la razón a Lennon cuando escribía esa canción en que no creía absolutamente en nada, sólo creía en él.
martes, marzo 02, 2010
La conspiración
Y muchos ha hablado de una conspiración, donde los gringos, aprovechándose de la naturaleza sísmica de nuestro país, probaron en nuestras tierras una bomba sísmica. No se si sea verdad, pero tanta coincidencia me hizo erizar los pelos. Porque no sólo las mediciones fueron exactas a minutos de ocurrido (cosa que la ONEMI no pudo hacer hasta casi una hora después) sino que además hubo una precisión exacta en las réplicas en su ubicación en profundidad.
En Afganistán e Irak (placas completamente distintas) también hubo temblores... dos países problemáticos para USA. Y ya que la bomba sísmica es perfectamente plausible... ¿no podría ser el principio de una guerra y de una campaña de eliminación de amenazas sin que lo supiéramos?
No lo sé. Lo único que tengo claro es que después de este terremoto cualquier teoría me parece válida.
Y si no, igual se me movió todo.
jueves, enero 07, 2010
¿A quién le importa?
Las largas noches de verano siempre traen muchas cosas nuevas, excitantes, locas e incluso prohibidas. Y es que el calor desinhibe, ayuda a mejorar la confianza y logra que nuestra vida chata envuelta en un invierno oscuro, gris y de pocas palabras se convierta en un soleado encuentro para todos los tipos de personas que forman nuestro país. Esos encuentros sirven para viejos amigos, otros que nunca se han visto y por supuesto para que los famosos tengan un nuevo comienzo en los primeros meses del año. Y si los famosos tienen encuentros, es ahí donde aparece el espécimen humano que inspira estas líneas.
Hay uno de nuestros compatriotas a quien no le puedo tener sino mucho, muchísimo asco. Ese tipo es Víctor Gutiérrez. Ya en otra crónica hablé sobre su falta de tino y su incansable necesidad de atacar al difunto rey del pop en busca de su propia fama, ocupando declaraciones de un joven que años después en forma extraoficial se retractaría y al que su propio padre habría obligado a mentir para sacar provecho de la fortuna de Jackson. Ese mismo hombre ahora está bajo tierra; se quitó la vida a las pocas semanas, aduciendo persecución por parte de los fans de Michael. Yo creo que la culpa y el rechazo de su hijo terminaron por volverlo loco. Por su puesto Víctor jamás se refirió al hecho.
Volviendo al susodicho periodista, me encuentro intentando analizar su trabajo, el cual parece ser de tiempo completo y (según él) muy profesional. Aunque se refugie en sus “fuentes”, su “rigor periodístico” y sus “líneas investigativas”, Víctor es simplemente un zángano. Sí, lisa y llanamente. Porque mientras otros viven para lograr cosas, inventan, crean, actúan componen, bailan, animan shows o simplemente se ven lindos, Víctor con sus lentes de ratón de biblioteca los mira desde fuera, como un ente castigador, omnipotente y justiciero.
No hay famoso que se escape a su garra inquisidora; si el propio Jackson sólo logró un arreglo monetario (el que Gutiérrez orgullosamente dice jamás haber pagado) es difícil que los integrantes de la vilipendiada farándula criolla logren más que una recarga en la BIP!. Víctor es un zorro, sabe cómo hacer las cosas; se acerca sigiloso, buscando una entrevista que le permita destapar a alguien más famoso que el que tiene enfrente. Víctor nunca enfrenta a quienes acusa, eso sería impropio, no le gusta el debate. Lo suyo es la acusación, el dato “duro” usando a quienes tienen menos fama, belleza o intelecto que quien es la real víctima. Y cuando lanza la bomba, el investigador de los cahuines y la basura escondida de los famosos se regodea y se arregla la corbata mientras entra al set de “Primer Plano” para contar sus nuevos descubrimientos.
Ayer fue nuevamente una noche de luces para Víctor. Entró con toda la desfachatez de quien no tiene vergüenza y busca proyección y fama a costa de otros. Con sus papeles anotados como si fuesen los diez mandamientos del periodista de la farándula, se sentó por enésima vez en el set de “Primer Plano” para aceptar los elogios de los tres conductores que gozan con los trapos sucios de cuanto famosillo aparece en las pantallas. Gutiérrez se arrellenó en su asiento, disfrutando el momento. Con toda parsimonia y levantando el dedo de la justicia y la verdad absoluta apuntó a través de la pantalla a la alicaída “show-woman” Marlen Olivari. Con imágenes sacadas de una grabación personal, mostró la entrevista realizada a Karen Amenábar, una ex integrante de “Rojo”,quien es abiertamente declarada lesbiana y que contaba su verdad. En pocas palabras, Karen abrió la caja de Pandora para Víctor que vio una luz nueva, llena de brillos y colores que escribía su nombre en la historia: sería el primero en obligar a un famoso a admitir su homosexualidad. Así, el regordete periodista consignó cada frase en las que Karen afirmaba haber sido pareja estable de Marlen y que terminó siendo su único amor verdadero, puro e infinito, hasta que se sintió traicionada por la falta de consecuencia en los actos de Marlen.
Por desgracia no había otra cámara apuntando a Víctor durante la entrevista. Seguramente habríamos visto sus lentes empañados, excitado por la situación morbosa, pero sobre todo por lo jugoso del descubrimiento. Ahora nadie más que él tendría la posibilidad de destruir a Marlen y su imagen de sex-symbol. Gutiérrez agradeció los elogios de los panelistas, mientras Jordi, hablando desde la vereda de los afectados, se dignó a decir “habían rumores, pero ella nunca ha dicho nada”. Pero Víctor volvía sobre las imágenes y los dichos de Karen, afirmando que la verdad era una, pura, absoluta y necesaria; con sus lentes justicieros y sus hojas llenas de información clasificada se levantó de su asiento y enarboló la bandera de quienes no tienen voz, belleza, talento ni intelecto, de todos quienes envidian a los famosos porque jamás tendrán ni siquiera un hálito de lo que ellos han obtenido. Víctor se sintió henchido de gozo, disfrutando cada segundo del nuevo escándalo que destapaba en pantalla, preparando un libro para sacar todos los trapos sucios de la farándula y hacer caer cuanta cabeza medio famosa se encuentre a su paso. El gordito de los lentes se sintió una estrella, un referente, alguien importante, la vedette de la noche, destruyendo la imagen de otra vedette, esa que alguna vez fue la mujer más deseada de Chile.
Al verlo tan animoso, crítico y justiciero, me acerqué a la pantalla del televisor y le grité al vidrio que contenía sus colores: ¡A NADIE LE IMPORTA, ZÁNGANO!